jueves, 8 de noviembre de 2007

LA ORACIÓN

I.- INTRODUCIÓN.

La oración no bebe servir únicamente para “rezar mecánicamente” sino para comunicarnos efectivamente con nuestro Dios, por intermedio de Jesucristo y el Espíritu Santo.

Por lo expuesto, el presente ensayo brinda conceptos básicos sobre la oración y enseñanzas que nuestro Señor nos dejó de cómo, cuándo, dónde, por qué y por quién orar. Termina en conclusiones pertinentes.


II.- LA ORACIÓN.

2.1. CONCEPTOS BÁSICOS.

2.1.1. Dios.
Ser supremo, todocreador, omnisciente y omnipresente. Representado por la Santísima Trinidad: Padre (Yavé ó Jehová), Hijo (Jesucristo) y Espíritu Santo.

2.1.2. Oración. Elevación de la mente a Dios para alabarle ó pedirle favores, gracias ó perdón.

2.1.3. Fe. Seguridad de que una cosa sea cierta, sin tener necesariamente la evidencia tangible.

2.1.4. Santa Biblia. Texto sagrado, conformado por un conjunto de libros Judíos y Cristianos revelados por Dios.

2.1.5. Sinagoga. Asamblea de fieles bajo la antigua ley Judía, donde estos ejercían su culto.

2.1.6. Pagano. Idólatra. Para los judíos y primeros Cristianos cualquier persona no bautizada ó que profesara la religión Greco-Romana.

2.1.7. Religión Católica. Conjunto de creencias y dogmas acerca de la divinidad y de las prácticas rituales para dale culto. Fue revelada por Jesucristo y conservada por la Santa Iglesia Romana.


2.2. ¿CÓMO ORAR?

Jesucristo dijo: “Cuando pida a Dios, no imiten a los paganos con sus letanías interminables: ellos creen que con un bombardeo de palabras hará que se los oiga. No hagan como ellos, pues antes de que ustedes pidan, su Padre ya sabe lo que necesitan” (Mateo 6, 7-8).

2.3. ¿CUÁNDO ORAR?

Debemos orar cuando queremos darle gracias a nuestro Dios, pedirle perdón ó alguna concesión. En el Evangelio está escrito: “Pidan y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta. Porque el que pide recibe; el que busca, encuentra; y se abrirá la puerta al que llama” (Mateo 7, 7-8).

2.4. ¿DÓNDE ORAR?

Jesucristo nos enseñó: “Cuando ustedes recen, no imiten a los que dan espectáculo; les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, para que la gente los vea. Yo se lo digo: ellos han recibido ya su premio. Pero tú cuando reces, entra a tu pieza, cierra la puerta y ora a tu Padre que está allí, a solas contigo. Y tu Padre que ve en lo secreto, te premiará” (Mateo 6, 5-6).

2.5. ¿POR QUÉ ORAR?

La oración a nuestro Señor debe ser practicada por nosotros porque Jesucristo lo hacía, enseñó a sus discípulos a orar (Mateo 6, 9-13) y nos dijo que debemos hacerlo (Mateo 26, 41).

2.6. ¿POR QUIÉN ORAR?

Debemos orar no solamente por nosotros, sino también por nuestros semejantes, conforme está escrito en la Sagrada escritura: “Exhorto ante todo a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres, por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad”.


2.7. LA ORACIÓN QUE JESUCRISTO NOS DEJÓ.

Jesucristo dijo: “Ustedes, pues, recen así: Padre nuestro que estás en el Cielo, santificado sea tu Nombre, vengas tu Reino, hágase tu voluntad así en la tierra como en el Cielo. Danos hoy el pan que nos corresponde; y perdonas nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores; y no nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del maligno” (Mateo 6, 9-13).



III.- CONCLUSIONES.

3.1.
Es importante que toda persona creyente en el Dios verdadero conozca determinados conceptos básicos del Cistianismo.

3.2. Es fundamental saber como, cuando, donde, por que y por quien orar, para ser escuchados por nuestro Señor.

3.3. El único intermediario entre nosotros y el Dios Padre, para que nuestras suplicas sean escuchadas, es Jesucristo.

3.4. La oración es un instrumento muy bueno para poder acercarnos a Dios, y Él nos conceda todo lo que le pedimos.

3.5. Existen oraciones muy bonitas y eficaces, las cuales cuando son oradas con fe, nos sirve para ser escuchados por nuestro Creador.

3.6. Cuando oremos no pidamos únicamente concesiones al Señor, sino empezemos por darle gracias por los dones recibidos diariamente, como la vida que cotidianamente nos otorga.

3.7. A nuestro Dios le agrada mucho que oremos también por nuestros semejantes, y no pensando exclusivamente en nosotros.



IV.- UNA ORACIÓN MUY BONITA Y EFICAZ.


ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO.

Espíritu Santo Tú que me aclaras todo,
que iluminas todos los instantes de mi vida
para que yo alcance mi ideal,
Tú que me das el don divino de perdonar
y olvidar el mal que me hacen,
y que en todos los instantes de mi vida
estás conmigo, yo quiero en éste corto diálogo
agradecerte por todo el bien que me haces,
confirmándote una vez más
que nunca quiero separarme de Ti,
por mayor que sea la ilusión material,
deseo estar contigo y todos mis seres queridos
en la gloria perpetua. Gracias por tu
misericordia para conmigo y los míos. Amen.

El creyente deberá leer ésta oración tres días seguidos,
sin decir el pedido, luego de los cuales éste se cumplirá,
por más difícil que sea. En seguida publicar en
señal de agradecimiento.


V.- REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.

5.1.
El Nuevo Testamento de Nuestro Señor Jesucristo con Salmos. Los Gedeones Internacionales. Sociedades Bíblicas en América Latina. Nashville, Tennessee 371214. USA. 1 960.

5.2. La Biblia. Editorial Verbo Divino. 111 Edición. Madrid – España. 1995.

5.3. www.oracion.com

No hay comentarios: